El Rabino Jacobo Avigdor fue uno de los personales más importantes de la comunidad judía de México: significó la esperanza y la nueva etapa de los judíos exiliados de Europa.
Nacido en la provincia de Galicia en 1896, desde corta edad acudió a la Universidad de Cracovia y Lvov y, gracias a su buena oratoria y su dedicación, fue reconocido como rabino principal de Drohobych y Boryslav en 1920. Más tarde, fue testigo de las atrocidades de los nazis en Polonia y Ucrania.
Estas fotos muestran al Rabino Avigdor en su cautiverio y su liberación en los campos de concentración. |
Después de su liberación, el rabino Avigdor decidió emigrar hacia México, donde se dedicó a difundir las ideas de paz y del conocimiento. Claro ejemplo se encuentra en su libro La visión del juadismo, en el cual muestra su interés en que los libros sagradados se encuentren en español, así como la liturgia de las fiestas y ceremonias que identifican al judaísmo.
“El libro que ahora edito es una prueba de una labor pionera. Existen muchos judíos en los países de habla española, pero por desgracia no hay en el idioma español ningún libro judío que trate del saber judío, ni del pensar judío ni de santidades judíos. La intención de este libro lleva por objeto presentar a los judíos de habla española un contenido de saber judío…” (Nota del rabino Avigdor, México, 1959).
En muchos de sus artículos, el Rabino Avigdor mostró la importancia de la paz y de la decencia que debería existir entre los humanos. Es por eso que destaca por ser un pensador que siempre está a favor de la paz.
Gracias a Sheindl Avigdor, en el Centro de Documentación Judío de México puede consultarse el fondo incorporado del Rabino Jacobo Avigdor.
* Francisco Javier Acosta Martínez es investigador de CDIJUM