Ma. Angélica Oliver Pesqueira.
Centro Cultural Manuel Gómez Morin.
En su respuesta del 3 de abril1, el rector Gómez Morin lo anima a quedarse por lo menos un año y argumenta que es más trascendente para la Universidad el que viva en un ambiente distinto y aproveche las enseñanzas de otras universidades para replicarlas en México. Don Manuel le informa de los avances se han logrado hasta esa fecha, en la Universidad, la organización de las Facultades, la aprobación de los reglamentos, los avances económicos, las clases en la Facultad de Derecho, etcétera.
El 25 junio de 1934, Gómez Morin recibe otra carta de González Aparicio desde Londres informando nuevamente sobre los cursos que ha tomado.
Acaba de concluir el “Término de Verano” de la Escuela de Economía de Londres, por lo que debo informarle respecto a mis trabajos escolares en él y en el “Término de Cuaresma”, a cuyo principio llegué a esta ciudad.
En el primer término atendí regularmente los siguientes cursos: Principios de Análisis Económico, prof. Robbins; Teoría Social y Económica del Marxismo, prof. Harold Laski y otros (conferencias) y Principios de Economía aplicada, prof. Plant.
Durante el segundo (abril-junio) concurrí a: Análisis Económico, prof. Robbins; Metodología de la Economía, prof. Robbins; Política Monetaria, prof. Hayek y Finanzas Públicas, prof. Dalton.
Se verá por ello que he preferido seguir un curso central, el de Análisis Económico, para seguirlo con más intensidad, variando los cursos complementarios en cada término, para abarcar diversos temas.
Además, he procurado asistir a la mayoría de las Conferencias públicas que con frecuencia organiza la Escuela, con especialistas extranjeros y a los actos culturales relacionados con mis estudios. Así, por ejemplo, pude oír la conferencia que dio en Londres el prof. Gustavo Cassel.
La Escuela se singulariza por el gran número de estudiantes extranjeros, siendo muy interesante su organización. Las Cátedras “lectures” son semanales, más las “classes” o sea los trabajos que nosotros llamamos de seminario y que se dan como parte aplicativa de los cursos. Las publicaciones periódicas de la Escuela, sus ediciones, dan a conocer los trabajos de especulación y de investigación.
Por este medio y por las conferencias libres, la Escuela mantiene su contacto con el público. Dentro de su profesorado hay, como siempre pasa, diversas tendencias, siendo las más características la neo-clásica (teoría del “equilibrio económico”) con Robbins y Hayek y la socialista, con Harold Laski. Cosa igual sucede entre los alumnos.
Como un organismo integral que es, la Escuela posee una espléndida y moderna biblioteca anexa, una tienda de libros que contiene las más diversas publicaciones en materia social, un restorán, salas de juegos y centro de alumnos, además de los cuartos que se asignan a cada profesor para sus estudios, trabajos de investigación, preparación de las cátedras, etc.
Su plan de trabajo comprende: economía; economía aplicada; historia; geografía; leyes; doctrinas económicas; contabilidad; antropología y estadística, como secciones separadas. Sus órganos trimestrales son “económicos” y “políticos”. Su gobierno, el cuerpo de gobernadores, gobernadores honorarios, el senado y el director.
Al margen de mis estudios económicos y de los trabajos de investigación que he iniciado, me preocupa observar la marcha y vida de la Universidad de Londres y de sus dependencias; del resultado de tal examen, lo tendré a usted al tanto con toda oportunidad.
Con igual propósito, y considerando que en Cambridge hay magnífica planta de profesores en Economía, he pensado que quizás sería preferible tomar el término escolar venidero (octubre, noviembre y diciembre) en aquella Universidad, si es que puedo obtener mi ingreso a algún Colegio para el sólo fin de cursos determinados. Para decidir sobre esto, siempre en el supuesto de que fuera posible, me agradaría conocer lo que Usted, en el interés de la Universidad nuestra por tales estudios, opinara.
Las vacaciones pienso aprovecharlas visitando la Unión Soviética y estudiando además de los temas concretos que sobre ella me preocupen, la organización educacional. La Sociedad de Relaciones Culturales de la URSS con el Extranjero me ha escrito congratulándose de mi viaje.
Estoy muy agradecido a los diversos elementos universitarios que han colaborado para hacer mi viaje posible; entre ellos debo hacer una mención muy especial de los profesores Mario Sousa y Ricardo Zevada, por su eficacia y generosidad, por su real actitud universitaria. La forma mejor en que yo podría corresponder sería obteniendo el mejor fruto de mi viaje en provecho, ante todo, de la propia Universidad. Por tanto ruego a usted me haga conocer los temas que le parezcan de especial interés que yo atienda en Europa, para dedicarme a ellos.
Debo hacer presente a usted mi agradecimiento por sus atenciones en relación a mi viaje y con la esperanza de tener el gusto de recibir sus letras con sus impresiones sobre mi trabajo futuro aquí, lo saludo con toda cordialidad y me ofrezco a sus órdenes, atto. Amigo y S.S.
Enrique González Aparicio
Gómez Morin le pide que le mande más datos sobre la organización de las conferencias y de las clases de las Universidades inglesas y que no deje de enviarle sus informes y conocimientos de su viaje a Rusia. Mientras que a su vez comenta sobre las dificultades que se han encontrado en el programa de Economía, particularmente por la falta de profesores y la marcha de la Universidad en general.
Finalmente González Aparicio va a Moscú y desde allá escribe al rector Gómez Morin el día 16 de agosto de 19342.
Muy estimado señor Rector:
Recibí su amable de 9 de julio, sin el proyecto de organización de la Sección de Derecho que me anunció y que espero con gran interés.
Remitiré a Ud., a mi regreso a Inglaterra, no sólo más detallada información sobre los cursos en la Escuela de Economía, sino sus programas y el último reporte anual.
Ahora quiero informarle de nuevas actividades universitarias que he podido cumplir. En la Universidad de Moscú existe el “Instituto Anglo-Americano” que ofrece cursos sobre la Teoría de la Economía Soviética, planificación de la misma, Educación en la U.R.S.S., etc.; Instituto en el que, desde mi llegada, quedé inscrito por acuerdo de la Sociedad de Relaciones Culturales en el Extranjero (V.O.K.S).
Atendí estos dos cursos: “The Political Economy of the Construction Period” y “The Social Background of the communist Society (sociology) y como mi asistencia a los trabajos académicos me dio derecho a examen, me presenté en ambos.
Ayer en ceremonia especial, se dio a conocer el resultado por el conocido pedagogo Piukevich y tuve el gusto de saber que había tenido éxito en las dos pruebas, no hay más calificación de ellas, según el sistema soviético, que el de “satifactorio” o no.
Sin embargo el profesor del primero de los cursos citados me manifestó que en el grupo de los trabajos seleccionados para publicarlos, de tomas las clases, se encontraba el mío en dicho curso. Esto me satisfice por un doble motivo: el alumnado se compuso de graduados de universidades americanas, profesores de ellas, especialista (como Ud. lo verá por la prensa que remito); las pruebas fueron escritas, naturalmente en inglés y yo era el único en tomarlas que no era de habla inglesa (pruebas de dos horas con temas designados en el momento).
Se lo comunico a usted porque estimo que aquel hecho, si bien muy insignificante, en algo favorece el prestigio de nuestra Universidad afuera y porque ha sido mi afán desde que salí, demostrar que sabía apreciar el interés de las personas que lo tuvieron para que hiciera mi viaje.
Envío a Ud., documentación sobre aquellos trabajos, reservándome para después el diploma que me otorga la Universidad de Moscú.
Tendré el gusto, más tarde, de expresarle mis impresiones de esta extraordinaria vida en la Unión Soviética.
Con el afecto de siempre y mis respetos para su familia, soy de Ud. amigo y S.S.
Enrique González Aparicio
El rector lo felicita por su desempeño y le solicita con mucho interés los programas de los cursos y de ser posible los puntos tratados en las pruebas que presentó en el Instituto Anglo-Americano de Moscú.
Al año siguiente en México, Enrique González Aparicio se hizo cargo de la dirección de la recién creada Escuela Nacional de Economía, ocupó el cargo desde 1935 hasta mediados de 1938.
Por desgracia en 1940, la Universidad perdió su colaboración académica pues la muerte lo sorprendió a los 50 años de edad, en plena producción profesional.
1 AMGM. Instituciones Educativas. Universidad Nacional. Rectoría. Correspondencia del rector con Enrique González Aparicio. 3 de abril 1934.
2 AMGM. Instituciones Educativas. Universidad Nacional. Rectoría. Correspondencia del rector con Enrique González Aparicio. 16 de agosto de 1934.